Claudia Sheinbaum Mantiene el Firme Compromiso de Nacionalizar el Litio para México
La futura presidencia de Claudia Sheinbaum promete ser un periodo de intensas decisiones en torno a un recurso natural de suma importancia: el litio. En una clara postura de defensa de los intereses nacionales, Sheinbaum anunció que su gobierno mantendrá la disputa legal contra Ganfeng, una de las principales empresas chinas en la industria del litio, que está reclamando a México una concesión a través de un arbitraje internacional. Esta decisión, enmarcada en la nacionalización del litio impulsada por Andrés Manuel López Obrador, refleja la firme intención del nuevo gobierno de priorizar los recursos naturales del país para el beneficio de los mexicanos.
De acuerdo con la presidenta electa, el gobierno tiene «suficientes argumentos» para ganar este litigio. Sheinbaum expresó que las condiciones de la concesión de Ganfeng son cuestionables, ya que la empresa no ha demostrado actividad significativa en la zona correspondiente. Este aspecto puede jugar un papel crucial en el desenlace del juicio, ya que la falta de trabajo en la región podría generar un argumento sólido a favor de la posición mexicana. Así, la administración entrante se prepara para lo que podría ser un combate legal prolongado y complejo, pero indispensable para el futuro del litio en el país.
Mientras tanto, Ganfeng International Trading, junto con sus socios británicos Bacanora Lithium y Sonora Lithium, ha solicitado una revisión internacional ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI). Este movimiento ha elevado las tensiones entre las firmas extranjeras y el gobierno mexicano, que hasta ahora se ha mostrado decidido a preservar el control nacional sobre sus recursos estratégicos. La disposición de Sheinbaum de no ceder ante las presiones de los inversionistas internacionales resalta la creciente ola de nacionalismo económico que caracteriza a la política actual de México.
El litio, conocido como el «oro blanco», está en la mira de industrias globales, especialmente la de los fabricantes de baterías recargables. A pesar de no contar con producción comercial de litio en México, el país posee vastos recursos potenciales que podrían colocarlo en una posición clave dentro del mercado mundial. Con la firmeza de la nueva administración, el futuro del litio en México se perfila como un escenario de disputas y aparente confrontación, donde el gobierno se plantea no solo la defensa de sus derechos, sino también un camino hacia la soberanía económica en un mundo que cada vez demanda más recursos tecnológicos sostenibles.
