El Grupo JJC ha resurgido en el sector de la construcción, cerrando contratos por US$90 millones en el primer semestre de 2025. Su regreso se centra en proyectos clave de la minería, como Zafranal, y en la infraestructura educativa, lo que le permite proyectar un crecimiento del 50% este año.
El Grupo JJC ha retomado un papel protagónico en el sector de la construcción peruana después de más de una década con poca visibilidad. La compañía, que se vio afectada por investigaciones judiciales en el pasado, ha apostado por una estrategia de negocio enfocada en la minería y la infraestructura educativa. Según su gerente general, Sebastián Martin, esta nueva dirección ha sido un éxito, superando las expectativas del primer semestre de 2025 y permitiéndole cerrar nuevos contratos y ampliaciones por un valor de US$90 millones.
El dinamismo del sector minero ha sido el principal motor del crecimiento de JJC. La empresa ha sido adjudicada para ejecutar las obras tempranas (advanced works) en el proyecto Zafranal, un hito importante para su portafolio. Además, participa activamente en las expansiones de operaciones mineras de gran envergadura como Quellaveco, Marcobre, Huaron y Antamina. Este enfoque en proyectos de alto perfil demuestra que el Grupo JJC busca consolidar su posición como un actor relevante en la industria minera, al tiempo que mantiene una presencia fuerte en otros sectores.
Para este año, JJC proyecta un crecimiento del 50% en su facturación, que superaría los S/464 millones de 2024. La empresa espera que la minería represente el 50% de sus ingresos, mientras que la construcción de colegios Bicentenario, donde mantiene una fuerte presencia, aportará el 45% y los proyectos viales un 5%. Esta diversificación de actividades y la estrategia de enfocarse en sectores clave son fundamentales para consolidar su regreso y reafirmar su liderazgo en el mercado de la construcción en Perú.