SCM Cosayach Yodo invierte US$5 millones para extender la vida útil de su proyecto Cala-Cala, asegurando el suministro de un mineral crítico para la industria global hasta 2033.
SCM Cosayach Yodo ha presentado ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Tarapacá una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) para la modificación de su proyecto Cala-Cala. Con una inversión de US$5 millones, la compañía busca integrar 1,849 hectáreas adicionales a su explotación actual. Esta extensión de reservas es un movimiento estratégico que permitirá prolongar el ciclo productivo de la mina hasta 2033, garantizando un suministro continuo de yodo sin alterar el volumen de extracción actual de 431,000 toneladas mensuales de caliche. La propuesta no contempla cambios en los procesos de lixiviación ni en el transporte del mineral.
La continuidad de las operaciones del proyecto Cala-Cala es crucial para la estabilidad de la cadena de suministro global, ya que el yodo es un mineral crítico con aplicaciones en diversos sectores como la medicina, la electrónica y la agroindustria. La oferta de este mineral está muy concentrada a nivel mundial, por lo que la prolongación de la vida útil de esta mina chilena ayuda a evitar riesgos de desabastecimiento en un mercado con demanda creciente. De esta forma, Chile se consolida aún más como un líder en la producción de yodo, reforzando su papel estratégico en la economía global.
El proyecto de modificación se ha diseñado con un fuerte enfoque en la sustentabilidad y la eficiencia. La compañía ha asegurado que mantendrá sus estándares ambientales y operativos actuales. Las labores de carguío, transporte y procesamiento se mantendrán idénticas a las ya vigentes, lo que minimiza cualquier impacto ambiental adicional y optimiza la infraestructura existente. Esta estrategia de extensión, sin aumentar la huella de la operación, demuestra el compromiso de la empresa por una gestión responsable y eficiente de sus recursos.