Malawi emerge como un actor clave en la minería africana, asegurando US$12 mil millones en acuerdos con China para explotar minerales críticos y transformar su economía.
Malawi está consolidando su posición como un proveedor estratégico de minerales críticos en África, tras la firma de acuerdos mineros y de infraestructura con China por un valor total de US$12 mil millones. Adicionalmente,un convenio de US5 mil millones busca establecer una zona económica especial en Chipoka, enfocada en la transferencia tecnológica, capacitación de mano de obra local y la inversión en los sectores agroindustrial y comunitario.
El creciente interés internacional en Malawi se debe a la alta demanda global de sus reservas de tierras raras, uranio, titanio y grafito. Otro avance destacado es el proyecto Kasiya de Sovereign Metals, que ha recaudado US$40 millones para explotar el mayor depósito conocido de rutilo y la segunda reserva más grande de grafito a nivel mundial.
Se proyecta que el yacimiento Kasiya producirá anualmente 245,000 toneladas de rutilo y 288,000 toneladas de grafito durante los próximos 25 años, con estimaciones de exportaciones minerales del país que alcanzarían los US$30 mil millones entre 2026 y 2040. El Ministro de Minas, Ken Zikhale Reeves Ng’oma, prevé que el sector minero aumente su contribución al PIB de menos del 1% actual a un 10% para 2030, una meta que se discutirá en la Semana Africana de la Minería y Energía. La transparencia de Malawi al abrir sus datos geológicos ha sido elogiada, considerándose un paso clave para atraer inversiones responsables y sostenibles, con la provincia china de Hunan desempeñando un papel estratégico en esta nueva fase de cooperación China-África.