En un movimiento audaz para consolidar su presencia en la industria global de minerales críticos, Estados Unidos ha ofrecido un paquete de financiamiento de **$786 millones** (1.140 millones de dólares australianos) destinado a proyectos en Australia enfocados en tierras raras y litio. Esta iniciativa se inscribe en el marco del programa **Make More In America** del Banco de Exportación e Importación de Estados Unidos (EXIM), que no solo busca aumentar la producción nacional, sino también garantizar una cadena de suministro robusta y sostenible en el futuro.
Uno de los grandes beneficiarios de este apoyo financiero es la empresa australiana de recursos minerales **American Rare Earths**, que ha recibido una carta de interés de EXIM por un paquete de financiamiento de **$456 millones**. Estos fondos estarán dirigidos a la construcción y operación de su innovador proyecto Cowboy State Mine (CSM) en Halleck Creek, Wyoming. Melissa Sanderson, miembro de la junta directiva de American Rare Earths, subrayó que esta inyección de capital es crucial para atraer inversiones privadas adicionales, que a su vez ayudarán a materializar el potencial del CSM.
El impacto de esta financiación no se limita solo a American Rare Earths, ya que la empresa **Anson Resources** también se ha beneficiado con una oferta de **$330 millones** para desarrollar una planta de producción de litio en la cuenca Paradox, Utah. Bruce Richardson, presidente y director general de Anson, expresó su entusiasmo al recibir esta carta de interés y destacó la importancia de la colaboración entre actores del gobierno y la industria estadounidense para llevar este proyecto a buen puerto. Su visión es clara: la cuenca Paradox es un enclave estratégico que puede convertirse en una fuente confiable de litio, fundamental en la transición hacia energías más limpias y sostenibles.
El compromiso de EXIM refleja una estrategia más amplia de Estados Unidos para asegurar su autonomía en la producción de minerales críticos, esenciales en tecnologías emergentes y la fabricación de baterías para vehículos eléctricos. Con una propuesta de reembolso de 15 años, este financiamiento no solo promete impulsar el desarrollo económico en Australia, sino que también transforma la dinámica del suministro global de litio y tierras raras, posicionando a ambos países como actores clave en la nueva era de la energía. Con esta inyección de capital, la colaboración entre Estados Unidos y Australia se perfila como una alianza estratégica que podría definir el futuro de la industria minera global.
