Colombia Inicia un Plan de Intervención Contra la Minería Ilegal en Departamentos Clave
Colombia ha puesto en marcha un plan de intervención de alto impacto, convirtiéndose en una tendencia crucial de seguridad y gobernanza: el gobierno ha iniciado operaciones sostenidas para combatir la minería ilegal en varios departamentos considerados estratégicos. Esta acción es una respuesta directa al aumento de la criminalidad y la devastación ambiental que genera la extracción ilícita, especialmente de oro, que financia grupos armados y desvía recursos multimillonarios de las arcas nacionales. La intervención busca restablecer el control territorial del Estado en zonas fronterizas y de alta biodiversidad.
El motor de estas operaciones es una estrategia coordinada e integral, que involucra a las Fuerzas Militares, la Policía Nacional y la Agencia Nacional de Minería (ANM). Las acciones no solo se centran en la destrucción de la maquinaria y la incautación de insumos químicos (como el mercurio), sino en la captura de las redes financieras detrás de esta actividad criminal. La tendencia es que el Estado está buscando golpear la estructura completa de la minería ilegal, no solo a los operadores de base, para asegurar un efecto disuasorio duradero.
El desafío para Colombia es la sostenibilidad de esta intervención y la oferta de alternativas económicas lícitas. La erradicación de la minería ilegal, si bien necesaria, debe ir de la mano con la formalización de los mineros artesanales que no están vinculados al crimen y el desarrollo de proyectos lícitos que ofrezcan empleo. El éxito de este plan definirá si Colombia logra proteger sus ecosistemas, asegurar sus ingresos fiscales y consolidar su seguridad nacional frente a uno de los negocios ilícitos más rentables del continente.

