COCHILCO: Uso de Agua de Mar Superará el Consumo Continental de la Minería Chilena
La Comisión Chilena del Cobre (COCHILCO) ha emitido una proyección de alto impacto que marca una tendencia crucial para el futuro del sector: el consumo de agua de mar desalinizada o sin desalar por parte de la minería chilena está a punto de superar el uso de agua continental (dulce). Este hito es un reflejo de la urgente necesidad de reducir la presión hídrica sobre las comunidades y los ecosistemas del norte árido de Chile, y consolida al país como líder mundial en la adopción de tecnologías de desalinización a gran escala para fines industriales.
El motor de esta monumental transición es doble. Por un lado, la escasez hídrica crónica en las regiones mineras y la licencia social para operar exigen la desvinculación de las fuentes de agua dulce. Por otro lado, la inversión masiva en plantas desalinizadoras y sistemas de impulsión de agua de mar (que implican miles de kilómetros de tuberías y complejos sistemas de bombeo) demuestra el compromiso multimillonario de las mineras, tanto estatales (CODELCO) como privadas. Esta inversión es trending, ya que representa la mayor adaptación ambiental y tecnológica del sector.
El desafío futuro, y la tendencia que se seguirá de cerca, es la sostenibilidad energética y el impacto costero de esta transición. Si bien el uso de agua de mar alivia la presión sobre los acuíferos, los procesos de desalinización son altamente intensivos en energía y generan salmuera. El éxito de esta estrategia dependerá de que la industria logre alimentar estas plantas con energía renovable (solar/eólica) y desarrolle tecnologías para la gestión ambiental de la salmuera. La capacidad de Chile para manejar estos retos consolidará su liderazgo en la minería verde del cobre a nivel global.

