Vaca Muerta Desplaza a Bolivia: Petrobras Consolida la Nueva Ruta del Gas
Petrobras, la gigante estatal brasileña, ha marcado un hito histórico en la integración energética de Sudamérica al concretar su primera importación de gas natural no convencional desde el mega yacimiento argentino de Vaca Muerta. Esta operación, aunque inicialmente a pequeña escala (100.000 metros cúbicos) y en modalidad interrumpible, valida comercial y operativamente una nueva y crucial ruta de suministro para Brasil. La transacción fue posible gracias a un acuerdo entre la propia Petrobras (a través de su subsidiaria POSA) y Pluspetrol, e involucró una compleja logística que utilizó el Gasoducto Norte de Argentina y una triangulación a través del sistema de gasoductos de Bolivia.
Este evento tiene implicaciones geopolíticas y económicas masivas, señalando el declive de Bolivia como proveedor dominante de gas para el Cono Sur. El Gasoducto Bolivia-Brasil, diseñado para transportar hasta 30 millones de metros cúbicos diarios (MMm³/d), opera actualmente a solo un tercio de su capacidad debido a la caída de la producción boliviana. La entrada del gas de Vaca Muerta, con un contrato que permite a Petrobras importar hasta 2 MMm³/d, llena este vacío y ofrece a Brasil un suministro de gas abundante, competitivo y de menor huella de carbono proveniente de la segunda reserva de gas shale más grande del mundo.
La capacidad de Argentina para exportar gas no convencional por ductos consolida a Vaca Muerta como el nuevo pilar energético de Sudamérica. El éxito de esta operación no solo beneficia a Petrobras, que busca diversificar su matriz energética con precios competitivos, sino que también impulsa la aceleración de la infraestructura argentina, incluyendo la reversión del Gasoducto Norte y la futura construcción del Oleoducto Vaca Muerta Sur. Este paso afianza la balanza energética positiva de Argentina y la proyecta como una potencia exportadora de hidrocarburos, redefiniendo el mapa energético regional en el marco de la transición global.