Rio Tinto Renuncia a la Opción de Adquirir el Megaproyecto Altar en San Juan
Una noticia de alto impacto ha sacudido el sector minero andino: Rio Tinto, una de las mineras más grandes del mundo, decidió no ejercer su opción de adquirir la participación mayoritaria en el Proyecto Altar, un gigantesco yacimiento de cobre-oro en San Juan, Argentina. Esta decisión representa un giro inesperado y estratégico, ya que la renuncia de una supermayor a inyectar el capital necesario para el desarrollo de un pórfido de cobre de clase mundial es interpretada por el mercado como una señal de extrema cautela ante la ejecución de megainversiones en jurisdicciones con alta volatilidad macroeconómica.
El Proyecto Altar, ahora bajo el control total de Aldebaran Resources, sigue siendo un activo geológicamente excepcional. El yacimiento es un depósito masivo de cobre que ha atraído la atención de las mineras más importantes del mundo, incluyendo la participación de BHP, que mantiene una inversión en Aldebaran para financiar la exploración. Este twist de la noticia es impactante: aunque Rio Tinto se retira, el potencial geológico se mantiene, y el proyecto continúa avanzando con el respaldo de otro gigante minero, lo que subraya la calidad intrínseca del recurso por encima del riesgo percibido de un solo inversionista.
La tendencia subyacente que revela esta decisión es la alta sensibilidad de los gigantes mineros al riesgo político en Argentina, a pesar de los esfuerzos legislativos (RIGI). Si bien la geología de la Cordillera de San Juan es incomparable, la no adquisición por parte de Rio Tinto envía una poderosa señal al mercado sobre la complejidad de comprometer miles de millones de dólares en la fase actual del país. Esto posiciona a Altar como uno de los proyectos de cobre más estratégicos y volátiles, cuya ejecución definitiva dependerá de que el gobierno argentino logre asegurar un marco de estabilidad a largo plazo capaz de mitigar las preocupaciones de riesgo de los mayores operadores globales.

