Bolivia y el Riesgo de los Subsidios
Un estudio del Instituto de Estudios Avanzados en Desarrollo (Inesad) ha puesto a Bolivia en alerta, sugiriendo que la eliminación abrupta de los subsidios a los hidrocarburos podría desatar una espiral inflacionaria devastadora. El informe, elaborado por analistas de renombre, advierte que esta medida podría disparar la inflación hasta un 32.3% y provocar una depreciación del 84% en la moneda para 2025. El estudio subraya que una decisión de tal magnitud, sin medidas compensatorias y un plan creíble, podría desencadenar un colapso económico que afectaría la vida diaria de millones de bolivianos.
La reforma de subsidios, que busca estabilizar la economía, presenta un dilema crucial. Mientras que una eliminación súbita podría provocar un shock inflacionario, un enfoque gradual no garantiza la estabilidad y prolongaría las presiones sobre la economía y el tipo de cambio. Los analistas del Inesad destacan que la eliminación de subsidios, si bien es necesaria a largo plazo, requiere una estrategia meticulosa para evitar consecuencias desastrosas. Además, el estudio revela un dato impactante: los subsidios actuales son regresivos, lo que significa que benefician de manera desproporcionada al 20% más rico de la población, exacerbando las desigualdades sociales en el país.
Se abre en una ventana nueva
Para evitar un escenario de caos económico, los expertos proponen un esquema mixto que combine un ajuste inicial contundente con fases programadas y cortas de eliminación de subsidios. Este enfoque permitiría al país absorber el impacto inicial y gradualmente alinear los precios con el mercado, minimizando el riesgo de una inflación descontrolada. La propuesta enfatiza la necesidad de una estrategia de transición que garantice la estabilidad macroeconómica y proteja a las poblaciones más vulnerables. La decisión sobre el futuro de los subsidios será un punto de inflexión para Bolivia, definiendo el rumbo de su economía en los próximos años.