La implementación de inteligencia artificial en procesos de voladura podría generar ahorros de hasta US$5.4 millones anuales, demostrando su potencial para mejorar la eficiencia y reducir la huella de carbono.
La inteligencia artificial (IA) y los gemelos digitales se están posicionando como herramientas cruciales para la modernización de los procesos de perforación y voladura en la minería. Ricardo Fernández, consultor independiente, demostró en el Jueves Minero del IIMP que estas tecnologías no solo mejoran la eficiencia operativa, sino que también generan ahorros económicos significativos y contribuyen a la reducción de la huella de carbono. Su presentación mostró un caso de estudio en el que la optimización de la secuencia de detonación y la fragmentación esperada resultaron en un beneficio económico anual de US$5.4 millones.
Fernández explicó que el cambio digital permitió un aumento del 12% en la eficiencia, pasando del 30% a casi el 42% en la recuperación de material. Este incremento, que a primera vista puede no parecer relevante, se traduce en la recuperación adicional de 90,000 m³ de material útil al mes, lo que justifica el ahorro millonario. Además, la mayor eficiencia en el diseño de las voladuras también condujo a una reducción del volumen total de material minado, impactando directamente en la sostenibilidad. Al evitar la minería de 238,000 toneladas, se logró prevenir la emisión de 567 toneladas de CO2, lo que destaca el potencial de la tecnología para alinear la rentabilidad con los objetivos ambientales.
El especialista enfatizó que estas tecnologías, como los gemelos digitales, no buscan reemplazar a los profesionales, sino mejorar la calidad y velocidad de sus decisiones. Un gemelo digital es una réplica virtual de un objeto físico que permite simulaciones y ajustes en tiempo real, lo que ofrece propuestas muy precisas a los ingenieros. Fernández concluyó que, aunque la IA brinda herramientas poderosas, el rol del ingeniero sigue siendo esencial para garantizar que la tecnología se aplique de manera rentable y segura, subrayando la importancia de la sinergia entre el conocimiento humano y la innovación tecnológica.