Tras un incidente en su mina de México, Orla Mining rebaja su proyección de producción anual de oro en un 5% y aumenta los costos operativos.
Orla Mining ha rebajado su meta de producción de oro para este año en un 5% y ha ajustado al alza sus costos operativos tras un incidente en la mina de óxido Camino Rojo, ubicada en Zacatecas, México. La nueva previsión consolidada de producción de oro para 2025 se sitúa entre 265,000 y 285,000 onzas, por debajo del pronóstico anterior de 280,000 a 300,000 onzas. Además, los costos totales de mantenimiento (AISC) se incrementarán, pasando del rango de US1,300-1,500poronzaaldeUS1,350-1,550 por onza. Esta revisión se produce después de que la compañía se viera obligada a aplazar parte de la producción tras el derrumbe de un muro del pozo.
El incidente, ocurrido el 23 de julio, fue provocado por fuertes lluvias que causaron el derrumbe de un muro temporal en el tajo abierto de Camino Rojo. Cerca de 390,000 toneladas de material cayeron al tajo, lo que representa aproximadamente una semana de minería. A pesar de la gravedad del suceso, la compañía informó que nadie resultó herido, no hubo daños en los equipos, no se perdió mineral y no se registró impacto ambiental. Sin embargo, el percance obligó a la compañía a reducir la proyección de producción de Camino Rojo en un 13%, situándola entre 95,000 y 105,000 onzas de oro, y a aumentar sus costos operativos en un 20%.
El anuncio tuvo un impacto en el mercado, con las acciones de Orla cayendo un 1.2% en la Bolsa de Toronto. Analistas como Ovais Habib de Scotia Capital señalaron que, si bien el recorte en las previsiones fue menos severo de lo que inicialmente se temía, los efectos en la producción de 2026 y 2027 siguen siendo inciertos debido a la suspensión temporal de las operaciones. Este incidente pone de manifiesto la vulnerabilidad de las operaciones mineras ante fenómenos naturales y cómo un evento localizado puede repercutir en la rentabilidad y las proyecciones a largo plazo de una compañía.